Wanzl y el medio ambiente

Wanzl, una de las empresas galvánicas más grandes de Europa, es también un pionero de la protección del medio ambiente en el revestimiento de superficies: la galvanotecnia completa trabaja, tras el proceso de cromado de 3 valencias, para la protección de las personas y del medio ambiente. La recién instaurada planta de galvanizado de Leipheim es ejemplar en su categoría y satisface las condiciones más duras en cuestión de durabilidad. ¡En este aspecto puede respirar tranquilo! Ya que el aire de salida se limpia a fondo hasta la más pequeña partícula con un lavador húmedo y un separador de gotas. Y el alto volumen de aire proporciona una buena climatización.
El calor del aire de salida de por sí sirve para una calefacción de la sala ecológica y ahorra 3 millones de kWh de energía y, con ello, una buena cantidad de CO2. Comparativa: este uso regenerativo de la energía de calores de escape se corresponde con un volumen de gas de 270.000 m³ o 300.000 litros de gasóleo de calefacción, la reducción de CO2en comparación con el uso fósil de energía estriba entre 500 y 770 toneladas de CO2respectivamente. Esta constante implicación se da: con la naturaleza, con los clientes, con los proveedores, los trabajadores, y con cualquier otra persona o grupo de interés que entre en contacto con Wanzl.
¡En Wanzl siempre estamos atentos y en forma! También en la protección del medio ambiente. Somos conscientes de que nuestra actividad influye en el medio ambiente. Por esta consciencia y nuestra convicción, consideramos una obligación llevar a cabo un comercio responsable con las personas y el medio ambiente. Para su protección Wanzl ha formado una comisión medioambiental interna. El objetivo principal, es reducir las cargas para el medio ambiente de forma continua y duradera, mediante el respeto de las leyes y directivas en vigor.
Wanzl es una empresa implicada en el proyecto «Ökoprofit», que ha obtenido el distintivo de mismo nombre por su compromiso de reducir el gasto en energía, agua y materias primas y minimizar la generación de residuos.
El porcentaje de reciclaje se sitúan en el 97 %, la cuota de reciclaje en el caso del plástico, en el 80 %.
Alrededor de un tercio de la corriente eléctrica de la fábricas Wanzl de Leipheim y Kirchheim procede de energía ecológica regenerativa.